Os reproducimos este artículo de Santiago Moll sobre algunas competencias emocionales que nos parecen interesantes para transmitir a nuestro alumnado.
1. Tomar de conciencia de los sentimientos.
Competencia que tiene como objeto percibir los propios sentimientos y saberles poner un nombre.
2. Manejar los sentimientos.
Competencia centrada en la propia regulación y autocontrol de los sentimientos.
3. Respetar la perspectiva.
Competencia en la que la persona debe ser capaz de entender y respetar los puntos de vista de los demás.
4. Analizar las normas que rigen la sociedad.
Competencia que tiene como objeto que la persona adquiera el espíritu crítico necesario para evaluar los medios sociales y culturales, así como los comportamientos de las personas.
5. Ser optimista.
Competencia que busca la capacidad para afrontar los retos diarios con la mejor predisposición y ánimo partir del autocomocimiento.
6. Ser responsable.
Competencia que busca el correcto comportamiento de la persona a partir de hábitos saludables y responsabilidad ética.
7. Ser cuidadoso.
Competencia que pretende potenciar la bondad y la generosidad, así como la compasión y la caridad hacia el otro.
8. Respetar a los demás.
Competencia que tiene como fin aceptar las diferencias individuales y grupales, así como respetar los derechos propios de las personas.
9. Saber identificar problemas.
Competencia que persigue la capacidad de discernir situaciones problemáticas que requieren un determinada solución. Además, busca la capacidad para saber identificar los riesgos así como los recursos que dicho problema implica.
10. Fijar objetivos realistas.
Competencia que prima la capacidad no sólo de reconocer y fijar un objetivo, sino de afrontar ese objetivo desde una perspectiva optimista y realista.
11. Saber resolver problemas.
Competencia destinada a la resolución de problemas y conflictos a partir de soluciones en las que predomina la visión positiva y la información necesaria.
12. Saber comunicarse.
Competencia en la que la persona debe esforzarse por atender a los demás tanto desde una comunicación verbal como no verbal y que esas personas sean capaces de recibir y entender los mensajes debidamente.
13. Saber expresarse.
Competencia que busca la capacidad para iniciar y mantener una conversación, así como expresar sentimientos y pensamientos con claridad tanto desde una comunicación verbal como no verbal. También debe buscar que el mensaje haya sido comprendido correctamente por el otro.
14. Saber cooperar.
Capacidad que prioriza la capacidad de ayudar a los otros en beneficio de un grupo y siempre desde una perspectiva didáctica.
15. Saber negociar.
Competencia que tiene como objeto la capacidad para resolver conflictos desde una visión pacifista y teniendo en cuenta los sentimientos del otro.
16. Saber decir que no.
Competencia que tiene como objeto el saber decir que no de forma clara y asertiva.
17. Saber pedir ayuda.
Competencia que tiene como fin identificar la necesidad de apoyo para así poder acceder a los recursos necesarios.
A modo de conclusión.
Las competencias emocionales suponen a día de hoy un auténtico reto para cualquier docente. Hay que empezar aprendiendo cuáles son las competencias emocionales para poder luego enseñarlas en el aula. Cada docente debería concienciarse de que la escuela no es sólo un lugar para aprender conceptos (inteligencia intelectual), sino que es una extraordinaria oportunidad para aprender emociones (inteligencia emocional), unas emociones que preparen a nuestros alumnos para afrontar con las mejores garantías un papel responsable en la sociedad.